Cuando la economía, especialmente la particular, es inestable, hay que buscar alternativas para reducir gastos. Compartir moto en estos casos se presenta como una solución interesante. Además de evitar el gran desembolso de una compra, nos olvidamos también del mantenimiento.
Qué es el motosharing
El motosharing o compartir moto consiste en lo mismo que hemos visto con otros vehículos o medios de transporte. El alquiler de bicis lleva ya años en nuestro país, aunque más allá de nuestras fronteras es una práctica bastante más popular.
El alquiler de coche por tiempo determinado es algo así como el rent a car tradicional, solo que por menos tiempo. Esta práctica se ha ido extendiendo y ahora también es posible compartir moto. Hoy en día, está disponible en varias ciudades, y se trata de un mercado que está en alza.
En el caso de compartir moto, hablamos principalmente de motos eléctricas. Con los coches, hay que llevarlos a un centro para recargarlos. Sin embargo, con las motocicletas, podemos reponer las baterías al momento.
Compartir moto es, sin duda, una propuesta muy interesante para solucionar problemas de transporte. Nos permite hacer uso de un vehículo únicamente cuando lo necesitamos, por lo que el coste y las preocupaciones son mucho menores.
Actualmente, son varias las compañías que ofrecen la posibilidad de compartir moto. Además, al menos en parte, se trata de modelos que han sido fabricados en este país, por lo que contribuye al desarrollo de nuestra propia industria.
Muving o Yugo son algunas de las empresas que se dedican al mercado de compartir moto. Cuentan con cerca de 2.000 motos, y su expansión continúa a lo largo y ancho del territorio nacional. Aunque también se plantea la idea de ir más allá de nuestras fronteras.
Cómo podemos compartir moto
Para compartir moto solo hay que seguir 4 sencillos pasos. Para empezar debemos descargarnos una app en el teléfono. Desde esta podremos hacer la reserva de una moto. Disponemos de 15 minutos para llegar a esta y desbloquearla. No hace falta que llevemos casco, ya que suelen incluir dos, además de fundas higiénicas por si queremos utilizarlas.
El precio es además bastante asequible. Ronda entre los 21 céntimos por minuto y los 24, dependiendo de la compañía que elijamos. Cada una de ellas tiene sus peculiaridades. Así, con Muving podemos aparcar y seguir usando la moto, con un coste de 10 céntimos el minuto. Con Ecooltra es posible anular sin coste alguno y con Yugo podemos adquirir bonos que nos permiten reducir el coste.
En cuanto al proceso de devolución al compartir moto, solo debemos aparcarla en las zonas señaladas. Devolveremos también los cascos y cerraremos esa sesión desde la app. De este modo, la siguiente persona que haga una reserva podrá utilizar esa misma moto.
Algunas de las ventajas de compartir moto son la reducción de las emisiones nocivas, así como el ruido. Por otra parte, se habla también de una disminución de la cantidad de vehículos, por lo que se evitan los molestos atascos.
