¿Cuántas veces hemos hablado del ánimo recaudatorio de tráfico? ¿Cuántas veces hemos criticado cómo los organismos públicos nos “persiguen” para conseguir sus extras?
Obviamente no somos santos. Corremos más de la cuenta, no respetamos siempre las líneas continuas y por supuesto que la mayoría no llevamos las motos 100% reglamentarias. El que no lleva un tubo de escape de competición, va sin catalizador o ha calzado unos slicks rallados o lleva unos retrovisores preciosos pero con los que no se ve un carajo.
Pero cuando tu figura representa a un organismo público que está justamente en campaña contra el alcohol y las drogas, y te pillan borracha como una cuba, y encima atropellas a una abuela, eso no tiene precio y es digno de mención.
¡¡Si señores!! No estoy contando un videojuego en el que te dan puntos por atropellar a ancianitas. Estoy contando algo que pasó esta nochebuena con una concejala de servicios sociales del Ayuntamiento de Alcorcón (Madrid).
La concejala, tras una celebración navideña decidió acabar su noche atropellando a una ancianita que pasaba por la calle. Tras el accidente la tasa de alcohol de la política era de 0,7 (tres veces más de lo permitido) así que, como decía Chicho Terremoto, tres puntos colegaaaaaa!!! y añadimos un Gallifante cortesía de la casa, para la concejala, la señora Pilar Araque!
La anciana, pese a estar en observación, parece que se encuentra bien (magullada) y será dada de alta en breve (si no lo está ya).
En fin, que si vendes ante los medios de comunicación que no se puede conducir bajo los efectos de alcohol o drogas, queda feo (por no decir cosas mucho peores) que te lleves por delante a una ancianita por ir borracha.
Espero sinceramente que todo el peso de la ley caiga sobre esta concejala y sobre todos aquellos que beban y/o se droguen y luego cojan sus coches. Porque la gilipollez de estos, puede causar la muerte o el desastre a otros.
