Dama de acero (por Raul Jurado)
“IN MEMORIAM de todas aquellas
mujeres caídas en el asfalto”
Y vuelve a entonar la carretera
su triste y lúgubre balada:
¿por qué a ella, por qué ella?
Detrás de las pistas más desvalidas
hay una dama,
mujer que pasa lenta
y decide dejar su huella,
que da riendas a su bruna yegua
portadora de sueños y alforjas
repletas de libertad.
Se agitarán sus colosales alas
más allá del horizonte bermejo,
leonadas y pardas,
que como fanales en ráfagas de luz
alumbrarán el asfalto.
Y volverá a entonar el poeta
su triste y lúgubre balada:
motera, mujer, dama de acero
hoy quedamos tras las nubes,
a la altura de la lluvia,
junto a las curvas del cielo.