La Primavera Motera

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Echaba de menos a la primavera motera. Aunque para unos más que para otros, el invierno es duro y largo. Todo está húmedo, llueve y nieva. Las carreteras tienen el asfalto demasiado frío. En muchas zonas se acumula la nieve. El hielo o la sal. Sin embargo, la primavera motera lo cambia todo.

Se dice siempre que los auténticos moteros salimos con independencia del frío. Solo con que haya un rayo de sol o no amenace lluvia ya nos vale para sacar las motos. Mezclamos el placer de conducir nuestras motos con el sufrimiento del frío y el dolor en las manos al parar a desayunar. Película que cada fin de semana repetimos. Nos levantamos, miramos el cielo. Miramos la temperatura. Soltamos un suspiro. Pensamos en el frío que vamos a pasar, y nos lanzamos a curvear como valientes.

Pero… llega un día en que las temperaturas empiezan su ciclo anual al alza y deja de hacer ese frío tan gélido que nos amarga. Empezamos a quitarnos capas de ropa de invierno. Nos quitamos win-stoper y cambiamos nuestros guantes de duro invierno por nuestros guantes de conducción favoritos.

Llega un día que las ganas de fin de semana dejan de ser una ilusión para ser casi una obsesión. Empezamos a mirar a todas horas por la ventana y a pensar… “pfff, que ganas de salir… pfff, con el día que hace y yo aquí con el papeleo… pfff, que llegue el finde yaaaaa…“.

Viva la primavera motera.

Como si fuese a volver el frío en cualquier momento solo pensamos en salir corriendo hacia el garaje para coger la moto y conducir hasta caer agotados de cansancio.

 

Y cuando llega el ansiado fin de semana, nos juntamos para curvear contentos y alegres. Ya no damos saltitos, nos frotamos las manos o nos reímos del frío que tenemos metido en los huesos. Ahora ya solo queremos hacer curvas sin parar y disfrutar de verdad de nuestra pasión.

Quizás haya otros momentos del año con mejor tiempo para conducir que la primavera, pero no hay una estación del año más deseada y acogida con más ilusión que ella.

Es por eso que como motera que soy le doy las gracias a La Primavera por haber llegado ya a calentar el asfalto y llenar todo mi camino de ese aroma a flores tan dulce. Curvear contigo siempre es una delicia y espero que te quedes aquí unos meses más porque no hay nada mejor que la primavera motera.

 

¿Cuál es tu estación del año favorita para salir en moto?