Nací motera.
No puedo evitarlo, lo llevo en los genes…
Desde pequeña, mis recuerdos siempre han estado asociados a la moto, grandes premios, boxes, pilotos… la culpa?
Para qué negarlo, es lo que conlleva que tu padre sea mecánico de motos de GP. Él siempre quiso tener varones y en cambio nací yo y a los 6 años mi hermana, pero eso nunca le frenó ya que esta ha seguido con la tradición y es mecánica de motos. Mi primera moto la tuve a los 2 años y a los 13 ya sabía cambiarle el aceite y carburarla!!!
Recuerdo que montábamos el box en medio del salón y yo era la piloto y mi hermana la mecánica, jajaja… aunque la pista no era muy larga, el pasillo nos servía de paddock y todo bajo la orgullosa mirada de mi padre. Cuando llegó la hora de salir, siempre la misma advertencia: no vayas a traer un novio futbolero!!!!! Y yo obedecí,mi marido es motero a más no poder,comparte mi pasión al 100% y juntos,descubrimos rinconcitos adorables a lomos de nuestro “bebé”, una Honda VFR 750 que aunque tiene ya 20 añitos, causa sensación en todas las concentraciones que va porque la tenemos muy bien cuidada, no la cambiaría por ninguna nueva y es que como dice mi padre: donde se ponga un carburador… que se quite todo lo demás!!
Lamentablemente, no disponemos de mucho tiempo para disfrutar de nuestra pasión ya que trabajamos muchisimas horas y yo todos los dias de la semana, así que cuando podemos darnos una escapadita, la disfrutamos a tope porque cuando será la próxima? Quién sabe…. jajaja
En fin, agradezco a Mujeres Moteras por darme la oportunidad de poder compartir a través de este relato lo que significa para mi la moto y sobre todo agradezco a mi padre que se preocupara por despertar en mi la pasión por este mundo desde la infancia….ráfagas y V`SSS
