¿Sabemos ir en moto? O nos creemos que sabemos y en realidad no conducimos correctamente.
En tantos años que hace que voy en moto he visto muchas cosas tanto en los demás como en mi misma.
Sin ir más lejos en mi accidente. Convencida que conducía muy bien me estrellé contra un coche. Fue negligencia del coche pero posiblemente ahora, 4 años después, reaccionaría de otra manera y aquel accidente ya no lo tendría.
¿Pero cuantos de vosotros habéis oído a más de un motero (entre las mujeres no lo he visto) alardear de lo mucho que corre o de cómo va en moto y luego habéis flipado de cómo toma las curvas? ¿Es la velocidad la que muestra si sabemos o no?
A veces parece que uno se saca el carné y es suficiente. O que con tener muchos kilómetros a la espalda se sabe conducir. E incluso he oído a más de uno decir que con un solo curso de conducción en carretera o circuito es más que suficiente para saber conducir perfectamente y que luego solo hay que hacer más kilómetros.
También he oído muchísimas veces que lo importante es seguir la rueda del de delante para aprender. Pero… ¿estamos seguros que el de delante sabe ir correctamente? O nos ponemos detrás del primero que por ir más rápido que nosotros nos ofrece rueda. Estoy absolutamente convencida que el que ofrece lo hacer con toda su buena fe para ayudar al que menos sabe pero… ¿es conciente que conduce bien?
Puede ser que si, que realmente la técnica sea tan sencilla que con un par de horas de formación en grupo o un montón de kilómetros hechos sepamos ir en moto a la perfección pero entonces quizás desprestigiaríamos un poco a los profesionales del motociclismo, que entrenan un día y otro, y otro y otro para estar siempre en constante mejora.
Mi opinión personal (que ya se que no tiene porqué gustar a todo el mundo) es la de formarse de manera constante. Siempre hay profesionales o personas que realmente saben ir muy bien en moto que nos pueden enseñar a ir mejor.
Y no por fardar o por ser el mejor del bar o de la carretera sino porque en saber conducir está la seguridad.
Nunca podremos evitar que los terceros cometan errores o negligencias, o que salga un animal en medio de la carretera a nuestro paso. Pero si podremos evitar errores absurdos como salidas de curva o caídas por no saber reaccionar.
