Suzuki vuelve a pisar fuerte en Milán con una nueva crossover pensada para todo y una superdeportiva icónica renovada. Más tecnología, más carácter y muchas ganas de recuperar su sitio… y volver a conquistar a la comunidad motera.
Suzuki ha llegado al EICMA 2025 con ganas de dejar claro que sigue muy presente en el mundo de las dos ruedas. La marca japonesa, con la presencia del mismísimo Kevin Schwantz, ha mostrado una gama renovada y dos modelos que se han llevado todas las miradas: la esperada GSX-R1000R 2026, una superdeportiva que celebra el 40º aniversario de la gama GSX, y la SV-7GX, una nueva crossover asfáltica con espíritu aventurero con la que la fábrica japonesa ha dado la sorpresa en Milán.
SV-7GX: la nueva polivalente de Suzuki
Suzuki ha vuelto a apostar por un concepto que durante años fue un éxito: una moto sencilla, divertida y capaz de todo. Así nace la nueva SV-7GX, una evolución natural de la mítica SV650 que ahora adopta una personalidad más crossover, ideal para quienes buscan una compañera polivalente con la que ir a trabajar entre semana y perderse el fin de semana.
Bajo ese diseño renovado sigue latiendo el clásico motor en V de 645 cc 90º, un propulsor que combina buen rendimiento, fiabilidad y un sonido muy especial que muchos echaban en falta en el catálogo actual de Suzuki. Pero lo que realmente marca la diferencia es la tecnología: acelerador electrónico, modos de conducción, control de tracción, quickshifter bidireccional y embrague antirrebote. En resumen, la SV que recordábamos… pero puesta al día.
Su posición en la gama es clara: se sitúa a medio camino entre la SV650 y las V-Strom, compitiendo directamente con motos como la Yamaha Tracer 7 o la Triumph Tiger Sport 660. Es lo que podríamos llamar una crossover para el día a día: cómoda, manejable y perfecta para quienes quieren una moto de carretera versátil sin complicarse.
Con 72 CV y una parte ciclo que apuesta por la estabilidad y la precisión —chasis multitubular en acero, llantas de 17 pulgadas y ABS de dos canales— la nueva SV-7GX promete ser tan fácil de llevar como la original. Además, la mayor protección aerodinámica, la pantalla regulable, el asiento a 795 mm y un depósito de 17,4 litros hacen que los viajes largos sean mucho más disfrutables, con una autonomía que rondará los 320 km.
El equipamiento también da un salto importante con una pantalla TFT, conectividad para smartphone, navegación e incluso información meteorológica, además de un puerto USB-C para cargar dispositivos. Vamos que la SV-7GX recupera el espíritu accesible y polivalente de la SV650, pero añade todo lo que hoy esperamos de una moto moderna: más comodidad, más autonomía y mucha más tecnología.
GSX-R1000R 2026: pura esencia deportiva
A primera vista se nota que la GSX-R1000R 2026 no es una más. El diseño es totalmente nuevo, con líneas agresivas y una presencia que impone incluso parada. Suzuki ha afinado la carrocería para que sea más aerodinámica y funcional, pero sin perder ese aire de “máquina de circuito” que siempre ha tenido la familia GSX-R. Y los colores elegidos para la ocasión no pueden gustar más: azul, rojo o amarillo, todos con detalles del 40º aniversario que le dan ese toque especial y nostálgico a la vez.
Bajo esa apariencia espectacular, Suzuki ha trabajado para que siga siendo una deportiva de verdad. Mantiene su motor de cuatro cilindros y 999,8 cm³, que ahora empuja con más fuerza, más suavidad y menos consumo. Gracias a tecnologías derivadas de la competición como el sistema de distribución variable SR-VVT, ofrece una potencia máxima de 195 CV a 13.200 rpm y un par motor de 110 Nm a 11.000 rpm, y ahora lo hace con más eficiencia, menos peso y cumpliendo con la exigente normativa Euro 5+.
Asimismo, la nueva GSX-R1000R también llega con una gran actualización tecnológica. Suzuki no ha querido privarse de nada y ha ido a por todas con su Suzuki Intelligent Ride System (S.I.R.S.), que reúne toda la artillería moderna: modos de conducción, control de tracción con 10 niveles de niveles, cambio rápido sin embrague, ABS que se adapta en las pendientes y hasta un sistema que ayuda en las salidas.
Y ojo al detalle: Suzuki ofrecerá unos pequeños alerones opcionales —sí, esos “winglets” que se ven en las motos de carreras— para mejorar la estabilidad cuando vas rápido. Aún no se sabe su precio exacto, aunque se rumorea que superará los 20.000 euros, y llegará a los concesionarios en 2026. Pero más allá de lo que cueste, lo importante es lo que representa: que la GSX-R sigue viva, más preparada que nunca y con ganas de seguir haciendo historia.
Un nuevo capítulo para Suzuki
Estas dos novedades no son solo lanzamientos; representan una marca que recupera impulso y vuelve a apostar por una oferta variada y actual. La GSX-R1000R mantiene viva la tradición deportiva, mientras que la SV-7GX abre la puerta a una nueva generación de motos versátiles y adaptadas a las necesidades de hoy. Ahora solo falta lo más importante: subirse a ellas y probar de primera mano todo lo que prometen.
