Una escapada en moto desde Barcelona hasta Jaca, en pareja y sobre dos trail muy diferentes: la Morbidelli T1002VX y la Benelli TRK 702. Curvas, paisajes del Pirineo y muchas sensaciones en una ruta pensada para disfrutar del viaje más que del destino.
Viajar en pareja siempre tiene su punto especial. Pero hacerlo en moto… eso ya es otro nivel. Esta vez, la ruta fue desde Barcelona hasta Jaca, y con dos compañeras de viaje muy distintas, pero con el mismo espíritu viajero: la Morbidelli T1002VX y la Benelli TRK 702.Un recorrido ideal para probar motos de este tipo: tramos de autopista, carreteras secundarias, curvas de montaña y paisajes que invitan a parar cada dos por tres para sacar una foto.
Dos motos, dos estilos, una misma ruta
La idea era sencilla: comparar dos trail perfectas para viajar en pareja. Por un lado, la Morbidelli T1002VX, una maxi trail de menos de 9.000 €, con pinta de viajera incansable y una comodidad que sorprende desde el primer kilómetro. Por el otro, la Benelli TRK 702, esa moto que ya se ha ganado su fama por ser una de las opciones más equilibradas del segmento.
La salida fue desde Barcelona con rumbo norte, con parada obligatoria en Castejón de Sos para reponer fuerzas (y disfrutar de esas vistas que siempre invitan a quedarse un rato más). Desde allí, camino hacia Jaca, donde esperaba el final de ruta y un buen hotel con spa para relajarse tras la ruta.
Morbidelli T1002VX: una maxi trail con alma rutera
La Morbidelli T1002VX se siente sólida, cómoda y mucho más ágil de lo que uno esperaría para una moto que pesa 238 kg en seco (unos 250 kg con gasolina + maletas). En las curvas más reviradas del Pirineo se deja llevar con una facilidad sorprendente, y eso ya dice mucho.
Su motor de 1000 cc y 87 CV no busca ser el más potente, pero sí el más agradable. Lo que realmente marca la diferencia es su par motor de 89 Nm, que le da ese empuje suave pero constante, ideal para viajar relajado y disfrutar del paisaje sin tener que ir pendiente del cambio todo el rato.

La respuesta del gas es viva, divertida y muy directa. Da gusto jugar con ella en los tramos más abiertos. Eso sí, el freno trasero se queda un pelín corto —hay que machacarlo bastante— y, con el peso que tiene la moto, se agradecería un poco más de contundencia. El delantero, en cambio, cumple bien su papel.
En cuanto al consumo, ronda los 5,8–5,9 L/100 km, algo elevado si tenemos en cuenta su potencia, aunque tampoco escandaliza para una 1000 cc. Sería ideal que en futuras versiones se optimizara un poco este punto, quizá con un motor de menor cilindrada pero la misma potencia. Soñar es gratis, ¿no?
TRK 702: la compañera equilibrada
La Benelli TRK 702 sigue siendo una apuesta segura para quienes buscan una moto viajera, equilibrada y con una relación calidad-precio difícil de superar. Frente a la Morbidelli, se nota algo más ligera de reacciones y con un comportamiento más dócil, perfecta para quienes valoran la suavidad y el control por encima de todo.
En pareja, la experiencia se multiplica
Viajar en moto en pareja es compartir cada curva, cada parada para un café y cada momento. Y si encima lo haces con motos que te permiten disfrutar del viaje sin renunciar a la comodidad, el resultado es una escapada redonda. ¿Qué más se puede pedir?